
Ingredientes:
– 500 gramos de harina de trigo.
– 25 gramos de levadura fresca.
– 250 gramos de zapallo.
– 250 gramos de camote.
– 1 cucharada de anís.
– 2 cucharadas de azúcar (blanca o morena).
– Canela al gusto.
– ½ litro de miel de chancaca.
– Aceite vegetal.
Preparación:
Pelar los camotes y trozarlos.
Pelar el zapallo, despojarlo de semillas y troza.
Cocinar los camotes y el zapallo en un litro y medio de agua, añadir el anís y ramas de canela, cocinar estos ingredientes por lapso de 25 minutos aproximadamente.
Una vez cocidos los camotes y el zapallo, dejar enfriar.
Ya fríos los camotes y el zapallo, licuarlos en el agua de cocción (retirar la canela antes de hacerlo).
Separar una taza de puré y verter el resto en un gran bol (donde se realizará la preparación), añadir la harina de trigo y mezclar con las manos.
Con la taza restante de puré, activar la levadura por unos minutos (hasta que salgan burbujas), y reservar.
Una vez que la levadura se active, mezclarla con la preparación de harina y puré.
Trabajar muy bien la masa (si queda floja, añadir más harina hasta lograr la consistencia deseada).
Una vez lista la masa, taparla con una tela y dejarla reposar por lo menos 12 horas (a temperatura normal, no ingresarla al refrigerador).
En una sartén o cacerola calentar abundante aceite.
Llenar una taza de agua tibia y sumergir allí las manos antes de tomar la masa (para evitar que se pegue), coger una porción, formar un aro con los dedos y verterlo en el aceite caliente, repetir esta operación.